Layo

De Wikipedia, la enciclopedia libre

Este artículo necesita una revisión de gramática, ortografía y estilo.

Cuando el artículo esté corregido, borra esta plantilla, por favor.

En la Mitología griega, el Rey Layo de Tebas era un héroe divino y un personaje clave en el mito de la fundación de Tebas. Hijo de Labdaco, fue criado por el regente Lico, su tío abuelo, después de la muerte de su padre. Cuando se hace mayor e intenta ocupar el trono, sus primos Anfión y Zeto usurpan el poder. Layo es expulsado de Tebas y el rey Pélope de Pisa, un reino vecino, le provee asilo. El rey le confía a su hijo Crisipo y le pide que le enseñe el arte de conducir caballos. Layo queda prendido del joven y un día lo rapta y viola. Según una versión Crisipo se suicida de la vergüenza, según otra Hipodomia, su madre, manda a sus medio-hermanos a que lo asesinen. Al darse cuenta de lo ocurrido, Pélope arroja sobre Layo la maldición de Apolo. En Grecia luego se conoció el "Crimen de Layo".

Después de la muerte de Anfión, Layo se hace rey de Tebas y Toma como esposa a otra descendiente del linaje de Cadmo y Harmonía: Yocasta. Durante años intentan tener hijos, sin conseguirlo. Layo acude al oráculo de Delfos pidiendo una solución. La respuesta del oráculo no le es satisafactoria: "Tu hijo matará a su padre y se acostará con su madre". Layo, prudente, guarda el secreto y no le dice a su mujer. Una noche, bajo efectos de la bebida yace con su mujer y engendra a Edipo. Para que no se cumpla la profecía, Layo abandona a Edipo a morir. Pero Edipo llega a mano de los reyes Pólibo y Peribea de Corinto.

Años más tarde, Layo se cruza con Edipo, el conductor le exige de mala manera a Edipo que se quite de en medio, a lo que éste rehúsa. En medio de la pelea, Layo sale del carruaje y es muerto a manos de su hijo.