Miguel Ángel Blanco Garrido

De Wikipedia, la enciclopedia libre

Miguel Ángel Blanco Garrido (Ermua, 13 de mayo de 1968 - Lasarte, 13 de julio de 1997), concejal por el Partido Popular de Ermua, Vizcaya . Secuestrado por ETA, durante dos días se concentraron cientos de manifestaciones multitudinarias en toda España para su liberación hasta que apareció herido de muerte con dos tiros por arma de fuego en la cabeza.

[editar] Biografía

Miguel Ángel Blanco nació en el seno de una familia humilde y tenía una hermana, María del Mar Blanco Garrido. Hijo de inmigrantes, su padre, Miguel Blanco albañil, y su madre, Consuelo Garrido (ama de casa), nacieron en la localidad orensana de Xunqueira de Espadañedo.

Miguel Ángel era licenciado en Económicas por la Universidad del País Vasco en Sarriko (Bilbao). Durante un tiempo siguió los pasos de su padre y trabajó de albañil hasta que encontró otro trabajo más acorde con sus estudios como economista en la consultoría Eman Consulting en la localidad de Éibar a donde se trasladaba diariamente en ferrocarril.

También tocaba la batería como aficionado en un conjunto musical y en varias orquestas. Así mismo, era aficionado al deporte y, entre sus planes estaba el de realizar una marcha a Madrid para reivindicar la restauración y reapertura del polideportivo ermuarra, que más tarde, tras su asesinato llevaría su nombre.

Alternaba su trabajo con la política desde 1995, año en el que se afilió a Nuevas Generaciones del Partido Popular, dirigidas en aquella fecha por su amigo Iñaki Ortega. Éste le convenció y logró que se integrara en el comité ejecutivo provincial. Cuando tuvo edad suficiente se comprometió con la política local. Fue número tres en las listas del PP en las elecciones municipales de mayo en 1995, en las que su partido cuadriplicó sus anteriores resultados en Ermua y logrando su acta de edil.

Aunque estaba soltero, tenía novia desde hacía siete años y proyectaba casarse en septiembre.

[editar] Secuestro

El mismo día del secuestro, una llamada en nombre de la organización independentista, efectuada como era habitual al diario Egin, había exigido al gobierno de José María Aznar, el acercamiento de los presos de ETA al País Vasco como condición indispensable para su liberación dando 48 horas como ultimátum. El mismo día se convoca una manifestación multitudinaria en Madrid y otras grandes ciudades para mostrar la repulsa al secuestro y pedir su liberación.

ETA, cincuenta minutos después de que concluyera el ultimátum, le disparó dos tiros a la cabeza dejándolo herido de muerte, a las 16:50 horas.

Los disparos, no lograron acabar con la vida del edil al instante, como parecía ser intención de los terroristas, puesto que el calibre utilizado fue inferior al habitual. Fue trasladado a un hospital en estado crítico y su agonía se prolongó hasta las 4:30 horas de la madrugada del domingo, cuando Miguel Ángel falleció.

[editar] Repercusiones

El asesinato de Miguel Ángel Blanco supuso una movilización unánime en contra de ETA. Tras su muerte se acuñó el término Espíritu de Ermua y se creó una fundación en contra del terrorismo con su nombre ^[1]. Su secuestro y asesinato provocó un sentimiento social multitudinario a largo plazo de rechazo hacia el terrorismo. A partir de entonces las organizaciones y las expresiones en contra de la violencia de ETA aumentaron.

El Foro de Ermua^[2] surge tras la reunión de varios de profesores después del secuestro y posterior asesinato del concejal. Su eje de acción es un manifiesto de repulsa donde se proclama su oposición a cualquier negociación con ETA que no sea su disolución como organización armada y la unidad política en esta materia especialmente de los dos grandes partidos políticos, PP y PSOE. Militantes de distitas organizaciones políticas, pacifistas o periodistas integran este grupo cívico.

Sus efectos más inmediatos fueron la pérdida de parte del miedo hacia el terrorismo en la sociedad vasca y el aumento del voto de los partidos no independentistas, PP y del Partido Socialista en las posteriores elecciones en el País Vasco.

El 30 de junio de 2006, se juzgó y condenó a 50 años de prisión a los responsables, Francisco Javier García Gaztelu (alias Txapote) y su compañera sentimental Irantzu Gallastegui (alías Amaia), por el secuestro y asesinato del concejal ^[3]. Durante los mismos días del juicio Telecinco emitió un polémico documental: Miguel Ángel Blanco: el día que me mataron ^[4].

Nueve años después todavía se celebran actos de homenaje ^[5].