Iglesias orientales

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Se llama iglesias orientales a las que se desarrollaron desde los primeros tiempos del cristianismo en las regiones del Imperio romano situadas bajo la órbita cultural de Bizancio y la lengua griega.

[editar] Origen

El cristianismo oriental tiene gran cantidad de estructuras y manifestaciones. Ello es debido a que Bizancio no pudo intervenir en las manifestaciones religiosas de los pueblos situados bajo su órbita de forma tan directa como Roma. Ello se debió a varios factores: el menor prestigio de Constantinopla entre los cristianos orientales, comparado con el que tenía Roma, sede apostólica de Pedro y Pablo, entre los occidentales; la mayor antigüedad de algunas de las comunidades cristianas orientales, que se remontaba en muchos casos a los primeros instantes del cristianismo; el nacionalismo presente en comunidades descendientes de culturas muy antiguas, como la mesopotámica, la persa, la egipcia, orgullosas de sus lenguas y tradiciones, etc.

Muchas de esas iglesias son ortodoxas. Otras son anteriores al cisma entre Oriente y Occidente y se suelen denominar iglesias orientales antiguas. Un tercer grupo la forman las iglesias uniatas, que habiendo sido antiguas u ortodoxas se unificaron en algún momento de su historia con la iglesia católica. Se puede hacer una división también en función de los concilios a partir de los que se origina su separación de la rama a la que pertenecieron.