Autogol

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En el fútbol, un autogol, gol en contra o gol en propia meta es un gol en el que un jugador introduce la pelota en el arco de su propio equipo, ya sea voluntaria o accidentalmente. Este gol se acredita al equipo contrario como un tanto a su favor.

El autogol generalmente ocurre debido a errores de la defensa al tratar de despejar tiros hacia el arco por parte del equipo atacante. En general, el gol es atribuido al jugador del equipo que se interpuso en la jugada y provocó la anotación. En caso de que el jugador del equipo defensor interfiriese la trayectoria del balón de manera accidental y que no altere el curso de la jugada (por ejemplo, al rozar o rebotar), el gol es atribuido al último jugador atacante en tocar el balón. Si el arquero es el último en tocar el balón, generalmente se interpreta como un intento de atajar y no como autogol, a menos que éste haya sido un caso especial producto de un error o por voluntad del portero.

El autogol más trágico de la historia es el que anotó el defensa colombiano Andrés Escobar durante el partido contra los Estados Unidos durante la Copa Mundial de Fútbol de 1994. Al regresar a su país, fue asesinado por un hincha encolerizado.

El autogol más rápido en la historia de los Mundiales fue en Alemania 2006. Lo hizo el paraguayo Carlos Gamarra, en el Partido Inglaterra - Paraguay a los 3 minutos de comenzado el encuentro.