Alfred Sohn-Rethel
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Alfred Sohn-Rethel (4 de enero 1899 Paris - [6 de abril]] 1990 Bremen) fue un economista y filósofo que desarrolló ampliamente el "alcance universal" de la "forma" en el caso de Marx, esto es, de la forma-mercancía.
Este autor sostenía que la abstracción objetiva, la funcionalidad objetiva de lo social en la realidad, generaría esa subjetividad científica capaz de "captar la naturaleza". Entonces, ese pensamiento capaz de decirse a sí mismo que "conoce-objetivamente-con-validez-universal" nos vendría prefigurado nada más y nada menos que en nuestra sociedad de cada día, y sería por tanto condición para que haya podido existir. Existe entonces, una especie de "causalidad" entre los aspectos más abstractos de la mercancía que darían la condición de posibilidad de la ciencia y de toda la crítica kantiana. El eslabón que enlazaría entonces la sociedad de la mercancía con la forma objetiva de conocimiento es el sujeto burgués, eso es, la constitución específica de la conciencia que, por un lado, se requiere para subsistir en la sociedad de la mercancía y del dinero, y que, por otro lado, debe tener el sujeto para ser capaz de un conocimiento objetivo.
La forma-mercancía, o sea la determinación social de las cosas como mercancías, en la moderna sociedad burguesa se ha convertido en forma universal debido a que el capitalismo ha hecho de la fuerza de trabajo una mercancía de la cual sus portadores disponen libremente: eso es, libres de dependencias personales, libres de toda coacción, menos la que los obliga a ganar dinero. Pero esa coacción impersonal es universal, de modo que el dinero se ha convertido en la sola finalidad de todo trabajo y la venta de la propia fuerza de trabajo en forma predominante de reproducción. En la sociedad mercantil, la satisfacción de cualquier necesidad concreta depende del dinero. La necesidad de disponer del máximo posible de dinero se convierte así en el primer "interés propio", igual para todos los miembros de la sociedad, aunque a pesar de todos los efectos alienantes del capitalismo, se sienten libres e iguales en tal sentido abstracto, se imaginan a sí mismos como individuos autónomos que se ganan honradamente el sustento con su trabajo.
Así el sujeto burgués es inconsciente de su propia condición social: sin más obligación que la de asegurarse la subsistencia, alimenta con su trabajo abstracto a la megamáquina de la valorización del capital, de cuyo funcionamiento, por otra parte, no asume responsabilidad alguna, ya que lo experimenta como regido por leyes naturales inasequibles a su propio actuar.
El sujeto en cuanto "actor consciente que no es consciente de su propia forma" se concibe a sí mismo como separado de la naturaleza y de los demás sujetos, a los que experimenta como mero "mundo externo"; con lo cual se presupone inconscientemente el marco social total, específico de la sociedad burguesa, el único que produce semejante forma de conciencia.